El entusiasmo europeísta de las primeras elecciones al Parlamento de Estrasburgo se ha diluido con el paso de los años. Tal y como vimos en los comicios del 7 de junio, el auge de los euroescépticos y la derecha ha tenido lugar en las elecciones europeas con el menor índice de participación. Esta tendencia no me parece sorprendente, aunque no estaría de más preguntarse los porqués.
Lo que sí me resulta extraño son los resultados italianos. ¿Cómo un país sometido por Il Cavaliere puede -después de numerosos escándalos sexuales y judiciales- continuar creyendo fervientemente en él? Acaso la mano negra de Berlusconi ha censurado las polémicas imágenes en su monopolizado mundo de los medios de comunicación?
Supongo que, al igual que en el affaire Mills y muchos otros, el primer ministro italiano ha hecho acopio de su gran poder, y los italianos están mal informados. Mientras que en todos los países de la Unión Europea se hablaba del caso Noemi y su cariñoso apelativo a Berlusconi, me imagino a las televisiones italianas inundadas con la mejor programación telebasura, para poder así desviar la atención de la sociedad.
Si esto es así, estamos ante una dictadura pasiva y silenciosa, pero no por ello menos peligrosa. El hecho de que un personaje oscuro como Il Cavaliere tenga el poder absoluto de los medios de comunicación de su país debería ser objeto de debate en la Europa democrática y libre que nos están vendiendo los políticos.
http://www.elpais.com/articulo/opinion/dictadura/pasiva/Berlusconi/elpepiopi/20090616elpepiopi_42/Tes
Nessun commento:
Posta un commento